Arabia Saudita se clasifica para la Copa del Mundo 2026 a expensas de Irak
La selección saudita logró asegurar su clasificación para la fase final de la Copa del Mundo 2026, a pesar de empatar sin goles con la selección de Irak en el partido que se disputó el martes por la noche en el Estadio Al-Inma en la ciudad de Jeddah, como parte del cierre del playoff asiático clasificatorio para el mundial.
El encuentro estuvo lleno de emoción y competitividad desde los primeros minutos, donde ambas selecciones intercambiaron el control en un ambiente de gran afluencia de público, y el partido tuvo oportunidades peligrosas de ambos lados, destacando el disparo de Saud Abdulhamid en el minuto 47 que pasó cerca del palo.
El francés Hervé Renard, entrenador de la selección saudita, confió en una alineación sólida encabezada por el trío Salman Al-Dosari, Firas Al-Buraikan y Saleh Al-Shammari en la delantera, respaldados por un mediocampo equilibrado que incluyó a Nasser Al-Dosari, Abdullah Al-Khaibari y Musab Al-Juwair.
Por su parte, la selección iraquí intentó amenazar la portería de Nawaf Al-Aqidi en varias ocasiones, a través de los movimientos de Zidan Iqbal y Mirkhass Doski, pero la destacada organización defensiva liderada por Hassan Tambakti y Jihad Zakari frustró todos los intentos.
Los últimos minutos fueron muy emocionantes, tras una serie de cambios realizados por Renard para activar el ataque, con la entrada de Abdullah Al-Hamdan y Nawaf Al-Bushal, pero la defensa iraquí se mantuvo firme hasta el pitido final que anunció el empate sin goles.
Con este resultado, la selección saudita elevó su puntuación a cuatro puntos, lo que le aseguró la clasificación oficial para la Copa del Mundo 2026, beneficiándose de su victoria anterior sobre Indonesia por tres goles a dos en la primera ronda del playoff asiático.
Después del final del partido, los jugadores del equipo verde y el cuerpo técnico celebraron con los aficionados que llenaron las gradas, en una escena que confirma la continua exitosa trayectoria de la selección saudita en las eliminatorias, logrando su séptima aparición en la historia del mundial.
El encuentro estuvo lleno de emoción y competitividad desde los primeros minutos, donde ambas selecciones intercambiaron el control en un ambiente de gran afluencia de público, y el partido tuvo oportunidades peligrosas de ambos lados, destacando el disparo de Saud Abdulhamid en el minuto 47 que pasó cerca del palo.
El francés Hervé Renard, entrenador de la selección saudita, confió en una alineación sólida encabezada por el trío Salman Al-Dosari, Firas Al-Buraikan y Saleh Al-Shammari en la delantera, respaldados por un mediocampo equilibrado que incluyó a Nasser Al-Dosari, Abdullah Al-Khaibari y Musab Al-Juwair.
Por su parte, la selección iraquí intentó amenazar la portería de Nawaf Al-Aqidi en varias ocasiones, a través de los movimientos de Zidan Iqbal y Mirkhass Doski, pero la destacada organización defensiva liderada por Hassan Tambakti y Jihad Zakari frustró todos los intentos.
Los últimos minutos fueron muy emocionantes, tras una serie de cambios realizados por Renard para activar el ataque, con la entrada de Abdullah Al-Hamdan y Nawaf Al-Bushal, pero la defensa iraquí se mantuvo firme hasta el pitido final que anunció el empate sin goles.
Con este resultado, la selección saudita elevó su puntuación a cuatro puntos, lo que le aseguró la clasificación oficial para la Copa del Mundo 2026, beneficiándose de su victoria anterior sobre Indonesia por tres goles a dos en la primera ronda del playoff asiático.
Después del final del partido, los jugadores del equipo verde y el cuerpo técnico celebraron con los aficionados que llenaron las gradas, en una escena que confirma la continua exitosa trayectoria de la selección saudita en las eliminatorias, logrando su séptima aparición en la historia del mundial.