El entrenador del Club Al Quwa Al Jawiya, Ali Abdul Jabbar, rompió su silencio tras la dolorosa derrota que sufrió su equipo ante Duhok por 3-1 en las semifinales de la Copa de Irak, afirmando que el equipo no estaba en su mejor momento, y que la salida del torneo es una "gran decepción" para los aficionados del club que esperaban un título que pusiera fin a una temporada difícil.

Abdul Jabbar dijo en sus declaraciones tras el partido:

"Primero, me disculpo con nuestra afición, teníamos la aspiración de llegar a la final, pero desafortunadamente no estuvimos en nuestro día. El partido se nos salió de control en momentos cruciales, y pagamos el precio de los errores individuales y la imprudencia en algunas situaciones."

Continuó hablando sobre el rendimiento del equipo:

"A pesar de un comienzo no muy bueno, intentamos regresar en la segunda mitad y anotamos el gol del empate, pero la expulsión afectó mucho el equilibrio del equipo, y Duhok aprovechó la situación con inteligencia. No pudimos seguir el ritmo después, especialmente con la gran presión del público."

Sobre los cambios y la caída del equipo en los últimos momentos, explicó:

"Los cambios eran necesarios para intentar revitalizar al equipo físicamente, pero las lesiones y el cansancio tuvieron un efecto claro. Los últimos minutos fueron muy difíciles, y perdimos la concentración, y eso es algo que debemos considerar."

En cuanto al futuro del cuerpo técnico, dijo:

"Asumo toda la responsabilidad, y esa es la lógica del fútbol, si no obtienes resultados, hay una evaluación y revisión. Ahora cerramos el capítulo de la copa, y esperaremos la reunión de la administración para definir el siguiente paso."

Abdul Jabbar concluyó su charla con un mensaje a los aficionados de Al Quwa Al Jawiya:

"Conocemos la magnitud de la tristeza y la frustración, y entiendo cada reacción. La afición merece lo mejor, y sentimos que les hemos fallado. Les prometemos que trabajaremos arduamente para reconstruir el equipo y corregir el rumbo en la próxima temporada."