El internacional marroquí Achraf Hakimi, estrella del Paris Saint-Germain, sufrió una fuerte lesión durante el partido que su equipo perdió ante el Bayern de Múnich (2-1) el martes por la noche, en el marco de la fase de grupos de la Liga de Campeones.

En un momento que dejó a todos sin aliento en el estadio Allianz Arena, Hakimi cayó tras una fuerte entrada del colombiano Luis Díaz, delantero del equipo bávaro, y abandonó el campo llorando, mientras sus compañeros de equipo y los aficionados marroquíes que siguen de cerca su carrera mostraban una clara preocupación.

Informes de medios franceses, incluyendo la radio "Monte Carlo", han indicado que la lesión que sufrió Hakimi parece ser un esguince en el tobillo izquierdo alto, lo cual fue confirmado por las imágenes iniciales que el jugador se realizó después del partido.

Esta lesión es considerada una de las más sensibles para los jugadores que dependen de la velocidad y los arranques repetidos, lo que aumenta las preocupaciones sobre su posible ausencia en el campo.

Los médicos clasifican el esguince de tobillo alto en tres grados, que varían según la gravedad del daño causado a los ligamentos.

Grado uno (leve): requiere un descanso que varía entre dos semanas y cinco semanas.

Grado dos (intermedio): requiere una ausencia que oscila entre 4 y 8 semanas.

Grado tres (severo): puede alejar al jugador de los campos por más de 3 meses.

Se espera que Achraf Hakimi se someta a exámenes médicos exhaustivos en las próximas horas, bajo la supervisión del equipo médico del Paris Saint-Germain, para determinar la gravedad de la lesión y el tiempo de recuperación previsto.

Los resultados de estas pruebas serán decisivos para definir el programa de rehabilitación del jugador, en un momento de gran expectación dentro del club parisino y de amplia preocupación entre los aficionados marroquíes, que esperan su pronta recuperación antes de la próxima Copa Africana.