
Ronaldo convierte a Hong Kong en un teatro al aire libre antes de la final de la Supercopa Saudí
Las multitudes se agolpan en gran número alrededor del hotel "Regent" en Hong Kong, donde se encuentra la delegación del Al-Nassr saudí en preparación para la final de la Supercopa, para seguir al astro portugués Cristiano Ronaldo y disfrutar de un momento cercano a él.
Ni el calor del sol ni las largas horas de espera han disuadido a los aficionados de estar frente al hotel, donde la entrada exterior se ha convertido en una escena diaria llena de multitudes, con gritos de saludo y aplausos cada vez que Ronaldo saludaba desde dentro del autobús o al entrar y salir.
Entre las historias destacadas, se encuentra la de Bruno, un portugués residente en Macao, que recorrió una hora con su hijo llevando la camiseta de su selección, afirmando que vino específicamente por Ronaldo después de esperar más de seis horas en los alrededores del hotel.
Además, una joven china llamada "Kin" eligió hospedarse en el mismo hotel para seguir de cerca a su estrella favorita, mientras que otro joven aseguró que había visitado el lugar con su padre durante dos días consecutivos, solo con la esperanza de ver al capitán del "Alami".
Las multitudes se dividieron en cuatro puntos principales alrededor del hotel: dentro del vestíbulo para observar los movimientos de la estrella, frente a la entrada principal llevando camisetas del Al-Nassr y banderas de Portugal, junto a la salida privada de los jugadores, además de un restaurante en el piso superior, donde algunos pagaron grandes sumas para desayunar allí con la esperanza de un encuentro excepcional con "el don".
A pesar de las dificultades, los aficionados continuaron vitoreando su nombre y levantando sus fotos y camisetas, en una escena que refleja la abrumadora popularidad de Ronaldo, cuya historia no se limita a su carrera con el Manchester United, el Real Madrid y la Juventus, sino que también se materializa en el "Museo CR Live" cercano a la sede de la delegación del Al-Nassr, que documenta su trayectoria futbolística mundial.
Las filas de espera frente al hotel se han convertido en una señal diaria en Hong Kong, donde los aficionados al fútbol viven con la esperanza de conseguir un momento cercano a su leyenda favorita, antes del esperado enfrentamiento que reunirá al Al-Nassr con el Al-Ahli en la final de la Supercopa Saudí la noche del sábado.
Ni el calor del sol ni las largas horas de espera han disuadido a los aficionados de estar frente al hotel, donde la entrada exterior se ha convertido en una escena diaria llena de multitudes, con gritos de saludo y aplausos cada vez que Ronaldo saludaba desde dentro del autobús o al entrar y salir.
Entre las historias destacadas, se encuentra la de Bruno, un portugués residente en Macao, que recorrió una hora con su hijo llevando la camiseta de su selección, afirmando que vino específicamente por Ronaldo después de esperar más de seis horas en los alrededores del hotel.
Además, una joven china llamada "Kin" eligió hospedarse en el mismo hotel para seguir de cerca a su estrella favorita, mientras que otro joven aseguró que había visitado el lugar con su padre durante dos días consecutivos, solo con la esperanza de ver al capitán del "Alami".
Las multitudes se dividieron en cuatro puntos principales alrededor del hotel: dentro del vestíbulo para observar los movimientos de la estrella, frente a la entrada principal llevando camisetas del Al-Nassr y banderas de Portugal, junto a la salida privada de los jugadores, además de un restaurante en el piso superior, donde algunos pagaron grandes sumas para desayunar allí con la esperanza de un encuentro excepcional con "el don".
A pesar de las dificultades, los aficionados continuaron vitoreando su nombre y levantando sus fotos y camisetas, en una escena que refleja la abrumadora popularidad de Ronaldo, cuya historia no se limita a su carrera con el Manchester United, el Real Madrid y la Juventus, sino que también se materializa en el "Museo CR Live" cercano a la sede de la delegación del Al-Nassr, que documenta su trayectoria futbolística mundial.
Las filas de espera frente al hotel se han convertido en una señal diaria en Hong Kong, donde los aficionados al fútbol viven con la esperanza de conseguir un momento cercano a su leyenda favorita, antes del esperado enfrentamiento que reunirá al Al-Nassr con el Al-Ahli en la final de la Supercopa Saudí la noche del sábado.