
Ali Wahab: Octava clasificación histórica para la liga iraquí con los clubes
En una de las historias de éxito más destacadas de esta temporada en el fútbol iraquí, el entrenador Ali Wahab escribió una nueva línea en su carrera, después de haber llevado al Club de Amanat Baghdad de regreso a la Liga de Estrellas de Irak, tras una difícil e importante victoria sobre el petróleo de Basora por un gol a cero, en el partido de repesca (play-off) que se celebró en el Estadio Al-Shabab, con una destacada asistencia de aficionados y una gran expectativa por parte de los seguidores del fútbol iraquí.
La victoria no fue solo un paso técnico hacia la liga de las estrellas, sino que fue la culminación de la trayectoria de un entrenador experimentado que sabe muy bien cómo reconstruir equipos y convertirlos en proyectos exitosos, demostrando una vez más que Ali Wahab merece con creces el título de "el padrino", después de haber logrado por octava vez en su historia llevar a diferentes equipos a la clasificación para la Liga de Estrellas.
Desde el primer momento en que asumió el mando de Amanat Baghdad, Wahab fue claro en su visión: construir un equipo cohesionado, que juegue un fútbol organizado y luche hasta el final. A pesar de todas las dificultades, desde la falta de apoyo, la escasez de recursos y la ausencia de nombres brillantes, logró crear una combinación colectiva destacada que demostró su capacidad en los momentos decisivos.
En el enfrentamiento contra el petróleo de Basora, Ali Wahab eligió la mejor estrategia, jugando con equilibrio y calma, y confiando en la disciplina táctica, para llevarse el partido con un gol marcado en el minuto 79 por el jugador Jabar Karim, otorgando al equipo el pase a la liga de los grandes.
A pesar de la victoria histórica, el entrenador sorprendió a los aficionados después del pitido final cuando declaró:
“Mi camino ha terminado con la Amanat, y deseo éxito a quien venga después de mí.”
Una declaración clara y directa, que confirma que Ali Wahab cumplió su misión con honor y profesionalismo, y prefirió retirarse en la cima del logro, dejando atrás un equipo listo y encabezando los titulares de los periódicos.
Wahab es considerado uno de los entrenadores locales más exitosos en el ascenso a la Liga de Estrellas de Irak, ya que anteriormente ha llevado a varios equipos hacia la luz, registrando hoy su octavo logro con Amanat Baghdad, confirmando que es el entrenador de "los playoffs" y los renacimientos futbolísticos.
La salida de Wahab de Amanat Baghdad abre la puerta a preguntas sobre la identidad del próximo entrenador del equipo, mientras que fuentes cercanas al club confirman que hay una intención de confiar en un entrenador joven que continúe lo que comenzó el padrino.
En cuanto a Ali Wahab, es seguro que no estará alejado por mucho tiempo y será un objetivo para muchos clubes que buscan a un hombre que sepa leer los detalles y reconstruir equipos desde los escombros.
La victoria no fue solo un paso técnico hacia la liga de las estrellas, sino que fue la culminación de la trayectoria de un entrenador experimentado que sabe muy bien cómo reconstruir equipos y convertirlos en proyectos exitosos, demostrando una vez más que Ali Wahab merece con creces el título de "el padrino", después de haber logrado por octava vez en su historia llevar a diferentes equipos a la clasificación para la Liga de Estrellas.
Desde el primer momento en que asumió el mando de Amanat Baghdad, Wahab fue claro en su visión: construir un equipo cohesionado, que juegue un fútbol organizado y luche hasta el final. A pesar de todas las dificultades, desde la falta de apoyo, la escasez de recursos y la ausencia de nombres brillantes, logró crear una combinación colectiva destacada que demostró su capacidad en los momentos decisivos.
En el enfrentamiento contra el petróleo de Basora, Ali Wahab eligió la mejor estrategia, jugando con equilibrio y calma, y confiando en la disciplina táctica, para llevarse el partido con un gol marcado en el minuto 79 por el jugador Jabar Karim, otorgando al equipo el pase a la liga de los grandes.
A pesar de la victoria histórica, el entrenador sorprendió a los aficionados después del pitido final cuando declaró:
“Mi camino ha terminado con la Amanat, y deseo éxito a quien venga después de mí.”
Una declaración clara y directa, que confirma que Ali Wahab cumplió su misión con honor y profesionalismo, y prefirió retirarse en la cima del logro, dejando atrás un equipo listo y encabezando los titulares de los periódicos.
Wahab es considerado uno de los entrenadores locales más exitosos en el ascenso a la Liga de Estrellas de Irak, ya que anteriormente ha llevado a varios equipos hacia la luz, registrando hoy su octavo logro con Amanat Baghdad, confirmando que es el entrenador de "los playoffs" y los renacimientos futbolísticos.
La salida de Wahab de Amanat Baghdad abre la puerta a preguntas sobre la identidad del próximo entrenador del equipo, mientras que fuentes cercanas al club confirman que hay una intención de confiar en un entrenador joven que continúe lo que comenzó el padrino.
En cuanto a Ali Wahab, es seguro que no estará alejado por mucho tiempo y será un objetivo para muchos clubes que buscan a un hombre que sepa leer los detalles y reconstruir equipos desde los escombros.