El equipo Al-Shorta sufrió una gran derrota de 5-0 frente a su invitado Al-Ahli de Arabia Saudita, en el marco de los partidos de la Liga de Campeones de Asia de élite para la temporada actual 2025-2026.

Los dos equipos se enfrentaron en el estadio Al-Zawraa en la capital Bagdad, dentro de los encuentros de la sexta jornada del torneo, en la que el club Al-Shorta no ha conseguido ninguna victoria hasta ahora.

Este resultado vino a completar la serie de derrotas contundentes del campeón de la liga iraquí frente a los clubes saudíes, ya que hubo tres razones principales detrás de esta sonora caída de los hijos de Al-Qithara Al-Khadra.

Primero, las grandes diferencias técnicas, donde Al-Ahli posee jugadores destacados y estrellas prominentes, que cualquier entrenador en el mundo desearía tener, como dijo el entrenador egipcio de Al-Shorta, Moamen Suleiman.

El club Al-Shorta, a pesar de su esfuerzo e intentos de igualar a su rival saudí, se encontró perdido frente a Al-Ahli, que dirigió el partido a su antojo, mientras que el equipo iraquí se limitó a observar, por lo que el factor de las diferencias técnicas fue decisivo y otorgó una gran ventaja a favor de Al-Ahli.

Segundo, la maldición contra los clubes saudíes, el equipo iraquí muestra un desempeño débil cada vez que enfrenta a un equipo de la Liga Roshn Saudí, ya que los resultados son abultados y revelan muchas fallas en el equipo.

Al-Shorta se enfrentó a los tres clubes saudíes, Al-Ittihad, Al-Hilal y Al-Ahli, recibiendo 13 goles en tres partidos, mientras que solo anotó un gol; a pesar de la fortaleza de los equipos rivales, Al-Shorta no mostró ninguna reacción ni movimiento en estos partidos, ya que siempre se rendía.

Sin lugar a dudas, los aficionados de Al-Qithara Al-Khadra están insatisfechos con lo que ofrece el equipo en la temporada actual, y específicamente en la Liga de Campeones de Asia de élite.

Y en el momento en que se esperaba que los aficionados llenaran las gradas con capacidad para más de 15,000 espectadores, los seguidores de Al-Shorta no asistieron al partido, salvo unas decenas que decidieron apoyar al equipo y no dejarlo solo, aunque esta presencia no fue suficiente para motivar a los jugadores de Al-Qithara.