El francés Hervé Renard, entrenador de la selección saudita, expresó su gran felicidad tras la clasificación oficial de la selección verde para la Copa del Mundo 2026, afirmando que este logro tiene un gran significado humano y personal para él.

Renard explicó en la conferencia de prensa después del partido contra Irak que el encuentro fue el más importante en su carrera como entrenador, señalando que su madre fallecida le dijo antes de su muerte en enero pasado que puede que no presenciara el Mundial, pero que deseaba verlo allí representando a la selección saudita.

El entrenador francés añadió que los aficionados sauditas jugaron un papel importante en esta histórica clasificación, elogiando la gran asistencia en las gradas del estadio de Jeddah, y considerando que el apoyo de los aficionados fue un factor decisivo para lograr la victoria y la clasificación.

Señaló que la estrella del encuentro, Salem Al-Dawsari, tuvo un rendimiento excepcional, pero enfatizó al mismo tiempo que el mérito de la clasificación corresponde a todos los jugadores que mostraron un alto espíritu de lucha desde el inicio de las eliminatorias hasta el partido decisivo.

Renard afirmó que este logro es un regalo especial para Yasser Al-Mashel, presidente de la Federación Saudita de Fútbol, en reconocimiento a su continuo apoyo al cuerpo técnico y a los jugadores, y también lo dedicó al jugador Fahd Al-Muwallad, deseándole una pronta recuperación y un regreso rápido a los campos.

El entrenador concluyó su discurso señalando que su familia ha sido su mayor apoyo durante su carrera con el equipo verde, explicando que su esposa estuvo presente en el partido desde las gradas, mientras que sus hijos siguieron el encuentro desde lejos, afirmando que su apoyo moral constante le da fuerza en cada etapa de su carrera como entrenador.