
Decisiones disciplinarias que sacuden el fútbol argelino
La liga profesional de fútbol anunció una serie de sanciones disciplinarias tras los partidos de la última jornada del campeonato nacional, siendo la más destacada la suspensión por dos partidos del mediocampista del Mouloudia de Argel, Arabi Thabiti, debido a "juego peligroso" que provocó su expulsión durante el enfrentamiento de su equipo contra el Mouloudia de Orán (3-2). La administración del Mouloudia se apresuró a presentar un recurso oficial para reducir la sanción.
En este contexto, la liga decidió suspender al gerente del Club Paradou, Amin El Abdi, hasta que se escuchen sus declaraciones en una sesión programada para hoy jueves.
Las sanciones económicas también afectaron a los entrenadores, ya que se impuso una multa de 100,000 dinares argelinos al entrenador del CR Belouizdad, el alemán Saad Ramovitch, por "protestar la decisión", y la misma sanción se aplicó a los asistentes de los entrenadores de Chabab de Saoura y Mouloudia de El Bayadh, Mustafa Jallit y Abdelghani Aouamri, respectivamente.
Los clubes tampoco se libraron de las decisiones, ya que se multó al Mouloudia de El Bayadh con 200,000 dinares argelinos, después de que se lanzaran proyectiles dentro del campo durante el último partido, sin registrar pérdidas materiales, considerando que fue la primera infracción del club.
En este contexto, la liga decidió suspender al gerente del Club Paradou, Amin El Abdi, hasta que se escuchen sus declaraciones en una sesión programada para hoy jueves.
Las sanciones económicas también afectaron a los entrenadores, ya que se impuso una multa de 100,000 dinares argelinos al entrenador del CR Belouizdad, el alemán Saad Ramovitch, por "protestar la decisión", y la misma sanción se aplicó a los asistentes de los entrenadores de Chabab de Saoura y Mouloudia de El Bayadh, Mustafa Jallit y Abdelghani Aouamri, respectivamente.
Los clubes tampoco se libraron de las decisiones, ya que se multó al Mouloudia de El Bayadh con 200,000 dinares argelinos, después de que se lanzaran proyectiles dentro del campo durante el último partido, sin registrar pérdidas materiales, considerando que fue la primera infracción del club.