Antonio Conte, el entrenador del Napoli, expresó su descontento tras la derrota ante el Manchester City por 2-0 en el inicio de la fase de grupos de la Liga de Campeones, afirmando que la expulsión temprana fue la causa directa del cambio en el desarrollo del encuentro, y describió lo que le ocurrió a Kevin De Bruyne como un destino cruel.

Conte dijo: "Salimos amargados del partido, porque la expulsión a los 20 minutos arruinó todo, habíamos preparado el partido de manera adecuada y comenzamos con una alta presión que les causó problemas, pero jugar con diez hombres durante más de 75 minutos hizo que las cosas fueran imposibles".

Sobre la sustitución temprana de De Bruyne, aclaró: "El destino fue cruel, la temporada pasada solo recibimos una tarjeta roja, y hoy tuve que sacrificar a De Bruyne, me siento mal por él porque perdió la oportunidad de jugar contra su antiguo equipo, pero no tenía otra opción".

Agregó: "Los jugadores mostraron un gran espíritu de sacrificio, intentamos aguantar lo más posible, y mantuvimos nuestro equilibrio a pesar de la inferioridad numérica, estos partidos a veces te obligan a defender y depender de contraataques".

Concluyó sus declaraciones diciendo: "Estoy satisfecho con el espíritu que mostró el equipo, y salí con impresiones positivas a pesar de la derrota, lo importante es que no nos derrumbamos ante un oponente fuerte como el Manchester City, y continuaremos trabajando con confianza en nuestra trayectoria europea."