Carlo Ancelotti, entrenador de la selección de Brasil, generó una gran controversia tras incluir al jugador del Barcelona, Raphinha, en un partido sin importancia contra Bolivia, durante el parón internacional, a pesar de haber dejado fuera a los tres jugadores del Real Madrid: Vinicius, Rodrygo y Militao, por razones de descanso.

Raphinha participó en los últimos treinta minutos del encuentro que se llevó a cabo a más de 4,100 metros sobre el nivel del mar en la ciudad de El Alto, a pesar de que Brasil ya había asegurado su clasificación para la Copa del Mundo antes de este partido.

Raphinha había brillado en el encuentro anterior contra Chile, donde lideró el ataque, creó oportunidades peligrosas y contribuyó con el segundo gol anotado por Estivao, pero no tuvo la misma efectividad contra Bolivia.

A pesar de que podía regresar al Barcelona después del partido contra Chile el 5 de septiembre, Ancelotti decidió dar a los jugadores tres días de descanso antes del encuentro contra Bolivia, lo que provocó críticas debido al desgaste injustificado impuesto a Raphinha, especialmente considerando que el jugador es uno de los pilares fundamentales del equipo.