El periódico alemán "Bild" ha revelado que el Bayern de Múnich podría enfrentar una nueva crisis administrativa, en medio de rumores sobre la posible renuncia del director deportivo Max Eberl de su puesto, después de menos de un año y medio en el cargo.

A pesar del éxito de Eberl, de 51 años, en completar el traspaso de Nicolás Jackson del Chelsea horas antes del cierre del mercado de verano, los informes de prensa han confirmado una creciente preocupación dentro del consejo de supervisión del club sobre su deseo de continuar trabajando.

Las fuentes indican que los miembros del consejo, entre ellos Herbert Hainer, Uli Hoeness y Karl-Heinz, sintieron durante una reunión la semana pasada que Eberl podría estar planeando irse.

Sin embargo, el periódico "Bild" ha negado actualmente la existencia de una intención inmediata de renuncia y ha confirmado que Eberl está de vacaciones cortas y regresará pronto para reanudar su trabajo en la sede del club.

Estas noticias llegan en medio de una tensión interna relacionada con la política de austeridad del club y la reducción de costos en un 20%, además de presiones públicas debido a algunas decisiones que Eberl siente que no puede asumir solo, mientras que los éxitos se atribuyen a la administración en su conjunto.

En caso de que se marche, Jan-Christian Dreesen será el único responsable restante en la junta directiva, con el director financiero Michael Dietrich a punto de abandonar el club a finales de septiembre, sin que aún se haya anunciado un reemplazo.