Informes de prensa han aclarado que la directiva del Sporting de Lisboa de Portugal se niega a desprenderse de su joven defensor Gonçalo Inácio durante el actual periodo de transferencias, a menos que se pague la cláusula de rescisión fijada en 60 millones de euros.

Inácio es uno de los talentos defensivos más destacados de Europa, ya que combina fuerza física y capacidad para leer el juego, además de su efectiva contribución en la construcción de ataques desde la línea de fondo, lo que lo ha convertido en un objetivo para grandes clubes.

El club Unión considera al jugador como una de sus prioridades en el actual mercado de verano, buscando reforzar su línea defensiva tras los errores defensivos que se hicieron evidentes en su último partido contra Al-Nassr en la Copa de Supercopa Saudí.

Las fuentes confirman que el club portugués se aferra a la permanencia de su defensor, considerando que el valor de la cláusula de rescisión es la única forma de completar la transacción, lo que complica la tarea del "gigante" dada la elevación de la cifra.

La pregunta que se plantea entre los aficionados del Unión es si la directiva se arriesgará a pagar la enorme cantidad para fichar a Inácio, o si buscará otras alternativas para fortalecer la línea defensiva antes del cierre del mercado.