La crisis del Club Al-Fateh en el tema del registro de sus nuevos jugadores se intensificó, después de que la FIFA añadiera la queja del exentrenador croata Bilic a la lista de casos que impiden el registro, además de otro caso internacional y un conflicto local con el Club Hajer.

La queja de Bilic llegó a pesar de su acuerdo preliminar con la administración del Al-Fateh para finalizar el contrato de mutuo acuerdo tras el campamento de verano del año pasado, sin embargo, el acuerdo incluía el pago de sus derechos financieros en cuotas, lo que lo llevó a recurrir a la FIFA después de que se incumplieran los pagos.

Esta situación coincide con otro conflicto en el que un exjugador extranjero reclama sus derechos, donde fuentes indican que se trata del argentino Zilayan, quien rescindió su contrato de manera unilateral el invierno pasado alegando retrasos en los salarios, mientras que la administración se niega a confirmar o desmentir la identidad del jugador.

En medio de estas complicaciones, el Al-Fateh continúa su campamento de preparación en España, donde se enfrentará el domingo al equipo sub-23 del Atlético de Madrid, tras haber ganado el primer partido amistoso contra el CE Europa por un gol a cero anotado por el argentino Vargas.

En el partido anterior, participó el portero Habib Al-Watyan, quien regresó del Al-Hilal, además de varios jugadores jóvenes como Muntadhar Al-Shakak, Mahdi Al-Aboud y Ostad Tambakti, este último espera ser registrado como jugador profesional tan pronto como se levante la suspensión sobre el club.