El entrenador catarí Wisam Rizq se acerca a regresar a la Liga de Estrellas de Irak a través del club Zakho, en un nuevo paso que refleja las crecientes ambiciones del club que planea consolidar su presencia en el ámbito local y del Golfo, tras su notable éxito en la temporada pasada. Estas negociaciones con Rizq vienen después de su experiencia anterior en Irak con Al-Quwa Al-Jawiya, que terminó con su renuncia tras el fracaso de superar la fase de grupos de la Liga de Campeones de Asia 2, lo que afectó negativamente los resultados del equipo a nivel local y llevó a un final anticipado de su carrera allí.

Zakho, que se prepara para participar en la Copa de Campeones del Golfo, busca construir un equipo fuerte capaz de competir, y parece que la administración ha depositado su confianza en Rizq por su visión de entrenamiento que se alinea con el proyecto y las ambiciones del club, especialmente en su intento de replicar la experiencia del entrenador Talal Al-Balushi, quien dejó una huella clara durante su tiempo con el equipo.

Ambas partes han entrado en negociaciones avanzadas y están cerca de un acuerdo final, con algunos detalles financieros y técnicos que se resolverán en los próximos días.

A pesar de la disponibilidad de grandes nombres en el mercado local como Ayub Odisho y Basim Qasim, quien firmó con el club Erbil, la administración de Zakho prefirió volver a la escuela catarí, debido a la flexibilidad y coincidencia de ideas que encontró con Wisam Rizq, quien mostró entusiasmo por la nueva experiencia, confirmando su admiración por el proyecto del club y los desafíos que le esperan.

Se espera que el anuncio oficial del contrato se realice la próxima semana, para que Zakho comience una nueva etapa bajo la dirección técnica catarí, con la esperanza de lograr una temporada excepcional en diversas competiciones.

Este paso se da después de que el entrenador anterior Abdul Ghani Shahid dejara su puesto para asumir el mando de Al-Zawraa, después de haber logrado terminar la temporada pasada con Zakho en el tercer lugar de la liga, continuando lo que había comenzado Al-Balushi, lo que llevó a la administración a buscar un entrenador que continúe construyendo sobre la misma línea, siendo Wisam Rizq la opción más cercana para llevar a cabo esta tarea.