El tribunal de Navarra ha presentado un cargo formal contra los jugadores del Athletic Bilbao, Iñaki y Nico Williams, por fraude y apropiación indebida de un vehículo Mercedes AMG E63 valorado en más de 130,000 euros.

Según los detalles de la denuncia, los hermanos están acusados de "simular una transacción de venta ficticia" con la ayuda de su tía en quiebra y otro intermediario, ya que el coche acordado no fue entregado ni se completaron los trámites legales, lo que causó graves pérdidas financieras a la empresa propietaria del vehículo.

El tribunal ha iniciado oficialmente las investigaciones y ha citado a los hermanos para ser escuchados como sospechosos, además de tomar medidas cautelares para garantizar que el coche no desaparezca o se manipulen pruebas del caso.

Los jugadores emitieron un comunicado oficial en el que confirmaron su conocimiento de la existencia de una denuncia legal en su contra relacionada con este asunto, subrayando que las acusaciones no se basan en hechos reales, y que lo presentado en la denuncia "distorsiona intencionadamente los hechos", en un intento de dañar su imagen personal y profesional al presionarlos para pagar cantidades indebidas.

Los hermanos afirmaron que niegan rotundamente haber cometido ninguna infracción legal, y expresaron su total confianza en el sistema judicial español, asegurando que su conciencia está tranquila porque no violaron la ley. También se comprometieron a tomar las acciones legales adecuadas contra quienes les hayan hecho acusaciones falsas o hayan utilizado el caso para difamarles intencionadamente.