En un nuevo paso hacia el profesionalismo en el extranjero, el club Pakhtakor de Uzbekistán, uno de los clubes más antiguos de Asia, anunció oficialmente su contrato con el defensor internacional iraquí Zaid Tahseen, proveniente de Al-Quwa Al-Jawiya, para comenzar un nuevo capítulo en su carrera futbolística a nivel continental.

El anuncio del traspaso se realizó esta mañana a través de las plataformas oficiales del club uzbeko, donde Zaid fue presentado como un nuevo jugador del equipo, en el marco de los esfuerzos de Pakhtakor por fortalecer su plantilla con jugadores que poseen alta calidad defensiva y experiencia internacional, lo cual el club encontró en el ex defensor de las Águilas, quien se ha consolidado como uno de los mejores defensores de la liga iraquí en los últimos años.

Zaid no se despidió en silencio, sino que se aseguró de despedirse del club Al-Quwa Al-Jawiya y de sus aficionados con un emotivo mensaje publicado en sus cuentas personales, donde expresó su agradecimiento y gratitud a todos los que lo apoyaron en su viaje dentro de las paredes del club azul, afirmando que representar a Al-Quwa Al-Jawiya fue un gran honor, y que los momentos que vivió con el equipo permanecerán grabados en su memoria sin importar los colores y destinos que cambien.

Esta transferencia significa que Zaid Tahseen se reunirá nuevamente con su ex compañero en la selección nacional, Bashar Rasan, quien es una de las piedras angulares del Pakhtakor en la actualidad, lo que le da un carácter especial a este traspaso y refuerza las posibilidades de armonía y entendimiento entre los jugadores en el campo, especialmente dado que ambos tienen una fuerte relación desde que representaron a los Leones de Mesopotamia en varios eventos.

La incorporación de Zaid a uno de los clubes más grandes de Uzbekistán no solo representa un paso hacia el desarrollo profesional, sino que también refleja la confianza que el jugador iraquí ha ganado en el mercado asiático, con la esperanza de que se consolide y contribuya a fortalecer la defensa de Pakhtakor, y competir por los títulos locales y continentales.

Los aficionados iraquíes, especialmente los seguidores de Al-Quwa Al-Jawiya, recibieron la noticia con una mezcla de orgullo y buenos deseos, expresando su apoyo total al jugador en su nueva experiencia, con la esperanza de que sea un buen embajador del fútbol iraquí en los campos de Uzbekistán, tal como lo hizo Bashar Rasan antes que él.